Nos apuntamos al gimnasio y empezamos un plan nutricional con todas las fuerzas y ganas del mundo pero terminamos dejándolo, a todos nos ha pasado alguna vez. Nos puede la pereza, la falta de constancia, la disciplina…
Normalmente, nos cuesta realizar ejercicio físico y cuidar nuestra alimentación porque asociamos tanto una cosa como la otra al hecho de dejar hacer otras actividades que disfrutamos más. Esta afirmación coge especial relevancia debido al aumento de la obesidad infantil.
A todos nos cuesta entrenar a diario y comer principalmente alimentos sanos en vez de los productos ultraprocesados y palatables que nos producen ese placer momentáneo. La pregunta que debemos hacernos y empezar a hacernos conscientes de nuestras decisiones es ¿merece la pena abandonar el gimnasio y el plan nutricional por el placer momentáneo? La realidad es que NO.
Nos cuesta cuidarnos, pero no a todos… ¿por qué algunas personas si lo consiguen? Lo que marca la diferencia es la motivcación. Es importante tener un objetivo. Si no tienes un objetivo concreto y medible en un tiempo concreto no te importará no acudir a uno o varios entrenamientos y saltarte el plan nutricional.
En FitGal te ayudamos a establecer tus objetivos y te acompañamos cada día para que consigas alcanzarlos….